29 Ene Día del croissant
Uno de los dulces más extendidos por el mundo es, sin lugar a dudas, el croissant. Este producto de hojaldre tan frecuente de todas las bollerías es uno de los más usados a la hora de realizar un desayuno o un aperitivo especial. Es por ello que podemos encontrarlo en numerosas festividades y también en eventos como cumpleaños y similares. Una de las ventajas que encontramos en los croissants es que pueden utilizarse acompañando a comidas saladas o dulces. Por ello puede servirse en desayunos y meriendas y adaptarse al gusto de una gran cantidad de clientes.
El croissant, un producto polivalente
A menudo podemos ver croissants dulces, como pueden ser aquellos rellenos de chocolate o crema pastelera. Pero no solo son dulces los que normalmente rellenan este producto, también podemos encontrarlos rellenos de jamón y de queso. Esto es lo que hace que este producto esté tan expandido por todo el mundo, ya que podemos encontrar diferentes formas de utilizarlo. Como todos sabemos, su origen procede de Francia, siendo uno de los productos más identificativos del país junto con la baguette. La realidad es que, en la actualidad, este producto se fabrica y vende en todo el mundo, lo que nos indica la importancia que ha ido adquiriendo con el tiempo hasta nuestros días.
Y no hay ninguna forma mejor de celebrar el Día del croissant que disfrutando de este manjar que hace las delicias de niños y no tan niños. Y es que a todos en un determinado momento nos encanta disfrutar de este tipo de productos. Si a esto le añadimos una buena compañía, podemos encontrar un momento de lo más especial. Es por ello que nos preocupamos día a día por mejorar la calidad de nuestros productos y ofrecer lo mejor posible a nuestros clientes. Solo así podemos conseguir su confianza y reconocimiento.